En el corazón de Calabozo, estado Guárico, Gustavo Dalis trabaja con dedicación la tierra que considera bendecida. Como propietario y agricultor de la finca El Palmar, ha convertido sus 10 hectáreas en un verdadero motor de producción. Actualmente, ha sembrado 4 hectáreas de patillas, pero su experiencia va mucho más allá. En diferentes épocas, estas tierras le han dado arroz, maíz, melón y otros cultivos que ha trabajado con esmero.

Producción ganadera y láctea
Además de la siembra, Gustavo Dalis también se dedica a la ganadería. Con esfuerzo y tradición, produce leche y elabora queso, que comercializa junto con la venta de ganado, manteniendo viva la esencia del campo venezolano.



Del productor al consumidor
El trabajo de Gustavo no termina en la finca. Su producción va directamente del agricultor al consumidor, llevando lo mejor del campo a la mesa de muchas familias. Él mismo se encarga de comercializar su cosecha, su queso y su ganado, beneficiando a quienes buscan productos frescos y de calidad, sin intermediarios.
Compromiso con el desarrollo agrícola
Su finca no solo es su hogar, sino el reflejo de su pasión por la producción agrícola y pecuaria, demostrando que el trabajo constante da sus frutos en esta tierra bendecida.
Por: Play Multimedios